2 tazas de fresas frescas, lavadas y sin tallos
1/2 taza de azúcar (o al gusto)
1/4 taza de agua
1 limón, jugo
Hielo
Agua con gas o agua mineral
Instrucciones:
Preparar las fresas: Corta las fresas en trozos pequeños y colócalas en un recipiente.
Preparar el jarabe de azúcar: En una cacerola pequeña, calienta el agua y el azúcar a fuego medio. Revuelve constantemente hasta que el azúcar se disuelva por completo y se forme un jarabe. Retira del fuego y deja enfriar.
Mezclar las fresas: Agrega las fresas cortadas y el jugo de limón a una licuadora.
Licuar: Licua las fresas y el jugo de limón hasta obtener una mezcla suave.
Agregar el jarabe de azúcar: Agrega el jarabe de azúcar enfriado a la mezcla de fresas en la licuadora y vuelve a licuar brevemente para combinar todo.
Filtrar (opcional): Si prefieres un refresco más suave y sin semillas, puedes filtrar la mezcla a través de un colador fino para eliminar las semillas de fresa.
Montaje: Llena vasos con hielo hasta la mitad.
Servir: Vierte la mezcla de fresas sobre el hielo en cada vaso, llenando aproximadamente tres cuartas partes del vaso.
Añadir agua con gas: Completa el vaso con agua con gas o agua mineral. Revuelve suavemente para combinar todos los ingredientes.
Decorar (opcional): Puedes decorar los vasos con rodajas de limón o fresas enteras para darle un toque adicional.
¡Disfrutar! Sirve inmediatamente y disfruta de tu refresco de fresa casero y refrescante.
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Trabajo en
Tienda Miele