El
Solomillo Wellington es una receta bastante rápida de hacer gracias a que es bastante sencilla de preparar y además es bastante conocida.
Este maravillo plato recibe este nombre debido a que todas la recetas que se hagan con carne o pescado que estén cubiertas por una masa de hojaldre y llevadas a cocinar al horno, por otra parte se puede acompañar con patatas, vegetales, distintas especias entre otras.
Si deseas realizar este exquisito plato a continuación te mostraremos la receta de solomillo Wellington y sus pasos para prepararlo para que así lo hagas en tu casa y disfrutarlo lo más que desees.
Ingredientes para la elaboración de la receta de solomillo Wellington
:
- 750 g de solomillo de cerdo ibérico (o ternera).
- 350 g de champiñones.
- 1 cebolla.
- 1 ajo.
- 160 ml de vino blanco.
- 1 lámina de hojaldre.
- 1 huevo batido.
- 7 lonchas de jamón ibérico.
- Aceite de oliva.
- Pimienta.
- Sal.
Preparación:
Primero se cortaran los champiñones y la cebolla luego los colocas en procesador de alimentos o batidora de baso para así conseguir que quede como una pasta.
Después se debe sofreír en una sartén con aceite de oliva esto se debe hacer a fuego lento ya que es solo para eliminar un poco la humedad en las pasta.
Por otro lado se debe ir sofriendo la carne de ternera en aceite de oliva por todos los lados esta que quede dorado, es solo para que agarre un poco de color. Luego deja que se enfríe y úntale un poco de mostaza.
En un área plana o mesa de trabajo extiende papel de film y sobre el papel coloca las lonchas de jamón y añadiéndole por encima la pasta de champiñones.
Envuelve el solomillo con el jamón que quede completamente cubierto junto con el papel de film se deben atar las puntas para que no se salga, luego se lleva al refrigerador por alrededor de 25 minutos para que conserve la forma.
Lo siguiente es estirar la lámina de hojaldre hasta que se lo suficiente grade para envolver el solomillo.
Procede a quitar el papel de film al solomillo y colocarlo en el hojaldre para así cubrirlo completamente.
Agrégale el huevo batido por encima con un pincel y lo llevas al horno a una temperatura de 200 °C por un tiempo de 20 minutos, luego colócale un poco más de huevo y baja la temperatura hasta los 180 °C por 15 minutos y ya estará listo para comer.