La Sopa de verduras y cualquier otro tipo de sopa, pudo haber sido uno de los primeros platos que nuestros antepasados fueron capaces de cocinar y es que ya desde el Imperio Romano la sopa era uno de los platos principales que se servían en las mesas. La Sopa de verduras es un plato excelente que combina los beneficios saludables de las verduras junto con un sabor delicioso y un plato caliente ideal para los días más fríos del año. Sin duda es en invierno cuando más se agradece poder consumir un abundante plato de sopa. La Sopa de verduras es una receta muy recurrida ya que no necesita mucha atención en la cocina mientras los ingredientes se cuecen y además es una receta muy versátil ya que puedes combinarla con diferentes ideas como incluir algo de pasta como los fideos. Puede formar parte del menú tanto de primer plato como segundo plato e incluso lo más pequeños de la casa no se negaran a tomar Sopa de verduras ya que si se ponen reticentes, prueba a añadir unos fideos y veras el agradable cambio que se produce en ellos. Un plato sabroso, nutritivo, sencillo y casi necesario para templar nuestro cuerpo en los días fríos.

Ingredientes para hacer Sopa de Verduras

Para hacer una Sopa de verduras excelente vamos a necesitar productos a poder ser frescos, ya que la diferencia en el sabor se va a notar mucho. En general puedes usar cualquier verdura que desees pero esta receta en cuestión mezcla ingredientes teniendo en cuenta que los sabores combinan perfectamente. A partir de esta lista de ingredientes puedes hacerte una idea de que sabores congenian mejor. Vamos a hacer Sopa de verduras para seis personas, por lo que puedes calcular con estas medidas lo que necesites. Necesitamos un pimiento de color verde de tamaño medio, un pimiento de color rojo también de tamaño medio, dos patatas de tamaño grande, un calabacín de tamaño grande, un nabo bien limpio y sin tierra, dos tomates medianos que no sean para ensalada, una coliflor más bien pequeña, tres zanahorias de tamaño medio, un manojo de ajos tiernos con unos seis o siete ajos, un manojo de judías verdes como menos de medio kilo, media col de pequeño tamaño, un hueso de jamón, agua y sal al gusto. Si no tienes hueso de jamón para dar ese toque diferente, puedes usar cualquier unto que tengas o que suelas usar para hacer cocidos y otros guisos.

Elaboración de la Sopa de Verduras

Para comenzar con la elaboración de nuestra Sopa de verduras lo primero es lavar y cortar toda la verdura en dados pequeños ya que cuanto más pequeños, mejor se cocerán y menos tiempo tendrán que estar en la olla. Necesitamos una olla de tamaño decente ya que estamos hablando de una gran cantidad de verduras más el unto, pero no te preocupes por que la verdura ira menguando de tamaño. Empezamos colocando las patatas, el nabo y las zanahorias ya que estos tardan un poco más en cocinarse y los cubrimos de agua. Cuando comience a hervir es la hora de añadir los pimientos y la cebolla, debemos esperar hasta que vuelva a hervir de nuevo tras añadir esto último. Es cuando añadiremos el brócoli, la coliflor, la col, el tomate, el calabacín y las judías, junto con el unto que hayamos elegido. Ahora es cuando debemos añadir la sal al gusto y esperar con paciencia a que este todo listo y bien cocido. Si es necesario podemos añadir un poco más de agua y volver a corregir de sal. En cuanto al tiempo de cocción final, no podemos determinar exactamente el tiempo pero con solo mirar que las verduras estén cocidas totalmente será más que suficiente. Un pequeño truco es el de vigilar las patatas ya que estas tienen una media de cocción de veinte minutos, que es la misma media que tienen la gran parte de las verduras que hemos usado en esta receta.

La Crema de espárragos es muy sencilla y tan solo vamos a necesitar:
Tres patatas grandes
Un manojo de espárragos trigueros
Una cebolleta fresca
Medio ajo
100 ml de nata
Dos huevos cocidos y cortados en rodajas para decorar
Eneldo a poder ser que sea fresco
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Pimienta al gusto


Para que nuestra Crema de espárragos tenga el sabor y la consistencia perfecta debemos seguir la receta al pie de la letra. Comenzamos limpiando los espárragos con abundante agua y después los cortamos en trozos y guardamos las puntas para más tarde. Tras esto usaremos una cazuela y doramos la cebolleta con un poco de aceite de oliva y medio ajo. Esperamos hasta que la cebolla tome un tono tostado y es cuando añadimos tanto los espárragos como las patatas peladas y troceadas. Lo salpimentamos todo y cubrimos con agua o con algún caldo de verduras. Una vez cocido todo esperamos a que se temple y pasamos por la batidora junto con la nata. Ya podemos añadir las puntas de los espárragos trigueros y calentamos a fuego lento durante unos minutos. Corregimos de sal y antes de servir lo adornamos con las rodajas de huevos duros que habíamos reservamos desde el principio.

Para elaborar nuestra deliciosa Crema de apio solo vamos a necesitar:
250 gramos de apio
Un diente de ajo
Una cebolla
Una patata mediana
Una pizca de pimienta blanca
Un poco de mantequilla
Aceite de oliva virgen extra
Sal al gusto


Esta receta de Crema de apio es tan sencilla de realizar como beneficiosa para nuestro organismo. Para elaborarla vamos a comenzar cortando la cebolla en pequeños trozos y laminar el diente de ajo. Hacemos lo mismo con la patata, la cual pelaremos antes de cortarla en trozos no muy grandes y por ultimo lavamos bien el apio y lo troceamos. En una olla añadimos una cucharada pequeña de aceite y una de mantequilla, rehogamos juntos la cebolla, el apio y el ajo laminado durante al menos unos 10 minutos o hasta que la cebolla este transparente.
Una vez conseguido, es cuando debemos añadir la patata junto con un vaso y medio de agua, sal y la pimienta al gusto. Debemos tapar la olla y dejar cocer durante unos 10 minutos a fuego suave. Una vez que todo esté listo tan solo debemos batir todo el contenido de la olla y pasarlo por un colador para eliminar los hilos del apio que hayan podido quedar. Para servir podemos adornar picando unas hojas del apio por encima de la crema.

Para preparar un delicioso Salmón asado al horno vamos a necesitar:
2 Lomos de Salmón fresco
Patatas
2 Tomates
1 Cebolla
1 Pimiento
3 Dientes de Ajo
Vino Blanco
Albahaca
Eneldo
Romero
Sal
Aceite
Agua


Para preparar un buen Asado de salmón usaremos una fuente de horno que aceitaremos un poco para que no se pegue. Colocaremos con la piel hacia abajo, los lomos del Salmón, los salpimentaremos y regaremos con un poquito de aceite. Los cubriremos con una capa de patatas en lonchas, unas rodajas de tomate y de Cebolla, el pimiento en tiras y los ajos laminados, procurando dejar encima el tomate.
Ahora especiaremos todo con un chorrito de aceite, el eneldo, la albahaca, el romero y una pizca de sal.
A continuación echaremos un vaso de vino blanco por encima, y un poco de agua para que no se seque demasiado.
Pondremos el horno a calentar y lo introduciremos todo a unos 200º durante una hora, hora y media.
Cuando el conjunto esté ya seco y las verduras se comiencen a tostar, será hora de sacar y servir. ¡Que aproveche!

Esta sencilla receta donde lo importante es el pez necesita:
8 lomos de Bacalao salado.
3 dl de Aceite de Oliva
5 Dientes de Ajo
Guindilla


Lo primero para preparar el Bacalao al Pil Pil, es preparar el bacalao para que no esté salado. Para ello, si los lomos son normalitos, los dejaremos a desalar durante unas 24 horas en un recipiente bien cubierto de agua, y le cambiaremos el agua en unas 3 ocasiones durante ese tiempo.
Una vez ya tenemos el Bacalao con su punto de sal óptimo, pondremos en una olla baja y amplia los ajos a dorar con la guindilla en trozos. Retiraremos estos elementos, y en el mismo aceite donde los hemos dorado, incorporaremos el Bacalao, primero boca abajo para que absorba el aceite aromatizado, y después por el otro lado.
Cuando los lomos ya estén en su punto, los retiramos y colocamos sobre los platos o fuente donde se servirá, cogemos los ajos y las guindillas, y junto con el aceite del sellado del Bacalao y los propios jugos que el pescado ha soltado, vamos creando, sin dejar de remover, una salsa espesa que incorporaremos después sobre los lomos.

Para que nuestro Conejo al salmorejo consiga el sabor esperado necesitamos:
Un conejo de buen tamaño
Una cabeza de ajos
Aceite de oliva virgen extra
Pimentón picante
Pimienta roja
Laurel
Orégano
Romero
Tomillo
Vinagre
Vino tinto
Sal gorda al gusto


El Conejo al salmorejo destaca por su fuerte sabor y para conseguirlo debemos empezar por comprar el conejo ya picado y lo colocamos en un bol, le añadimos un puñado de sal gorda y lo mezclamos bien para después reservarlo. Mientras picamos bien la cabeza de ajos y la mezclamos con un poco de sal gorda, el pimentón y la pimienta, además de añadir un poco de aceite y agua. Una vez que esté bien mezclada añadimos un poco más de aceite y una pizca de vinagre, batimos y añadimos al bol donde tenemos el conejo con la sal.
Mientras podemos ir mezclando las especias con un vaso generoso de vino al que añadimos un par de hojas de laurel, orégano y tomillo, cuando este bien mezclado lo vertemos sobre el bol donde está el conejo y lo tapamos con un paño de tela para dejarlo reposar durante algunas horas en la nevera. Una vez pasadas las horas, podemos freír poco a poco los trozos de conejo dejando el resto para el final. Lo vamos colocando en una cazuela de barro y por ultimo vertemos el resto por encima, lo ponemos unos minutos al fuego y ya estará listo.

Para elaborar nuestra Omelette de pollo solo vamos a necesitar:
Dos huevos
Una cucharada de leche o nata
Una cucharada de manteca
Pimienta
Sal al gusto
Para el relleno:
Dos muslos de pollo
Una cebolla
Media taza de nata
Perejil picado
Apio picado
Queso al gusto
Nuez moscada
Pimienta
Sal al gusto


Comenzaremos a preparar nuestra Omelette de pollo haciendo el relleno y debemos deshuesar los muslos de pollo y cortarla en trozos pequeños, para después rehogarlos en la sartén con una cebolla picada, manteca, una cucharada de perejil picado, media taza de nata, el apio picado y sazonamos con la sal, la pimienta y la nuez moscada. Freímos hasta que todo esté bien dorado y reservamos.
Preparamos los huevos batiéndolos con la nata o la leche hasta que no distingamos la clara y debemos evitar hacer espuma, sazonamos con sal y pimienta y reservamos. Por otro lado derretimos la manteca en la sartén y sin dejar que esta se queme, vertemos los huevos batidos. El secreto de una buena Omelette de pollo es que la cocinemos bien y para ello debemos ladear de vez en cuando la sartén para que se vaya haciendo por todas partes por igual. Una vez terminada de hacer, colocamos el relleno que habíamos reservado y la doblamos a modo de taco mexicano. Servimos inmediatamente y adornamos con queso rallado por encima.

Para conseguir un delicioso Pudin de frutas vamos a necesitar:
Medio litro de leche
100 gramos de azúcar
Cuatro huevos
Canela en rama
Un poco de cascara de limón
Cuatro magdalenas o dos bollos de leche
150 gramos de macedonia de fruta en almíbar
Caramelo liquido
Una copa de licor al gusto


Para nuestro Pudin de frutas comenzaremos caramelizando un molde para el horno y por otro lado hervimos en una cazuela la leche con la cascara de limón, el azúcar y la canela. Mientras podemos batir los huevos y añadimos poco a poco las magdalenas desmenuzadas y reservamos. Escurrimos bien la macedonia en almíbar y la añadimos a los huevos batidos con magdalenas, mezclamos bien y es cuando podemos añadir la leche que ya habrá templado.
Es cuando lo vertemos todo en el molde caramelizado y lo introducimos en el horno al baño maría, con una temperatura de 170º y al menos durante una hora. No dejes de vigilar el horno mientras se va cocinando, para comprobar si está terminado debemos pincharlo y comprobar que el utensilio sale limpio.